Cervezas La Salve

«En Pantori solo nos importa la calidad del producto y La Salve está buenísima»

«En Pantori solo nos importa la calidad del producto y La Salve está buenísima»

Entrevista a Unai Suárez, responsable de la tienda de alimentación donostiarra Pantori

Unai Suárez, posa junto a unas cervezas La Salve en la tienda donostiarra Pantori

Unai Suárez, posa junto a unas cervezas La Salve en la tienda donostiarra Pantori

Pantori es una tienda de alimentación atípica. Lo es porque surgió de internet pero ahora cuenta también con un establecimiento físico. Pero sobre todo porque sus promotores intentan hacer las cosas de forma diferente, incluso descarada. Buscan los mejores productos allá donde se encuentren. Así, están orgullosos de vender un queso de Valladolid en la cuna del Idiazabal («es que está cojonudo») o de recomendar una cerveza de Bilbao (La Salve, claro) en el centro de Donostia («¡hasta en la cuadrilla nos criticaban! pero ahora la compran todas las semanas»).

A Unai Suárez se le notan las ganas de romper moldes y sorprender con su trabajo. Tiene 23 rabiosos años y ha dirigido todos sus conocimientos de Administración y Dirección de Empresas a poner en los paladares los productos más selectos. Sin complejos ni tonterías. Se explica bien y se nota que le apasiona su trabajo.

¿Cómo surgió Pantori?
En Donostia ya existía Deskontu, que es una web como Groupalia. Cada día enviaban una oferta a los inscritos que podía ser de cualquier tipo. De ahí surgió en 2012 la posibilidad de crear Pantori.es, un proyecto desde el que cada día recomendamos un producto de alimentación especial. La idea fue a más: pasamos de tener solo un producto por día a tener una tienda online con más opciones. Y en contra de lo que suele ser habitual acabamos abriendo una tienda en Donostia. Bueno, dos porque también abrimos una panadería que hace pan con masa madre: The Loaf. Nos dimos cuenta de que es más fácil vender un txakoli cuando el cliente lo puede probar.

Encontrar a los primeros productores sería toda una odisea
¡Si al principio hasta teníamos que ir a buscarles en coche! Menos mal que en poco tiempo Pantori se hizo tan grande que incluso pudimos hacer productos exclusivos: como el queso azul de Ramón Lizeaga o el queso relleno de mermelada de higos al cava.

Y de repente llega El Comidista.

«La Salve está bien hecha, tiene muy buen sabor pero no se sale de ‘lo normal’ y eso es muy bueno»

Mikel López Iturriaga habla de nosotros en su blog de El País y de golpe tenemos 12000 visitas en un día de los que 3000 se hacen clientes. Ese post nos ahorró años de esfuerzo y nos puso en el mapa. El sistema que teníamos de pedidos por ejemplo en Navidad era ‘ancestral’, nada informático. Casi todo lo teníamos que gestionar a mano.

¿No es raro que la tienda física haya llegado después de la online
No es lo habitual, pero hemos comprobado que se retroalimentan. Ahora tenemos muchas visitas desde León a la web, y creemos que es porque ha habido muchos veraneantes de León en Donostia este verano. La gente viene de vacaciones, vuelven a su casa de Madrid y desde allí hacen el pedido ¿para qué van a ir cargados? Nos gusta esta mezcla, dinamiza la tienda. Teníamos usuarios fieles a la web, y creo que ahora hemos conseguido eso con la tienda física.

Vendéis una cerveza de Bilbao en el centro de Donostia. Nosotros por supuesto estamos encantados, creemos que esa rivalidad es más una pose que real.
Tengo a la cuadrilla loca. Me decían «Yo no vengo a Pantori a comprar una cerveza bilbaína». Desde que vi La Salve Bilbao por las redes tenía ganas de probarla porque si está buena a mí no me importa de dónde venga. Y está buenísima. Por eso le hemos dado media balda muy visible y a los que ponen pegas les leemos la etiqueta («Necesita 12 veces más tiempo que otras cervezas para su elaboración») y les recomendamos que la prueben.

«Ahora solo como pan bueno y bebo cerveza buena, como La Salve»

La gente quiere probar cervezas nuevas, pero que no sean muy raras. Y La Salve compite con las cervezas de batalla porque es refrescante. No pretende ser una de esas IPA muy fuertes que pueden llegar a aburrir. A casi todo el mundo le gustan las rubias, estamos acostumbrados a cañeros de bar. La Salve está bien hecha, tiene muy buen sabor pero no se sale de ‘lo normal’ y eso creo que es muy bueno. Es como nosotros con The Loaf, la panadería que vende pan con masa madre. Yo ahora solo como pan bueno y bebo cerveza buena.

La tienda Pantori, en Donostia, desde el exterior

La tienda Pantori, en Donostia, desde el exterior

El vuestro no solo es un proyecto de alimentación…
La Salsera que es el colectivo que está detrás de todo esto casi siempre se ha movido en torno a la alimentación (ellos son los que conocían a los productores y Deskontu puso la tecnología), pero también ha hecho sus pinitos en la cultura como con una pequeña editorial que ha publicado algún libro.

«La Salve compite con las cervezas de batalla porque es refrescante»

Siempre les ha movido las ganas de hacer los proyectos que veían que faltaban en Donostia. Un ejemplo, cuando los promotores volvieron del Erasmus en Londres se preguntaron por qué aquí nadie iba a los parques. Allí lo normal es pisar la hierba, y de ahí surgió Musika Parkean, que lleva los conciertos a lugares donde no estamos acostumbrados a disfrutar. Al primer concierto apenas fue nadie, al segundo más… y ahora nos piden que lo hagamos en más sitios. Nuestro objetivo no es hacernos ricos, pero al menos no perder dinero. Y hemos visto que estos proyectos diferentes tienen salida. Así que… seguiremos.

Una curiosidad, ¿por qué en Pantori te presentas como Miguel?
Es casi una broma interna. Queríamos ser irreverentes con lo de los nombres vascos, no buscábamos apoyarnos en el tópico para vender alimentación artesana aquí. Así que cada uno adoptamos un nombre español.